martes, 4 de octubre de 2016

Un sueño de lo que tengas enfrente

Dame un sueño de lo que tengas enfrente,
pues vengo despertando de una cruel pesadilla.
Y he descubierto amargamente el sentido de una inútil vida.

Que ha regresado la musa errante, amarga y evasiva.
Y me ha dictado una canción, que me ha reconfortado y enseñado
de lo que esta hecha la noche.

De que mas, sino de raras pesadillas, al igual que de cosas tontas y superficiales.
Quiero un sueño de lo que tengas enfrente,
ese instante que despierte, de absurdo temor y encontrar calor en tu abrazo inconsciente

Obtener un beso sin siquiera pedirlo, un bocadillo de madrugada y una sed saciada.
Pobre iluso que no encuentras tu camino.
Ingenuo pequeño que te encierras en la vigilia de ilusiones.

Cuando solo necesito una sonrisa clara, el tierno abrazo de una hija malcriada.
Un cigarrillo en el frío y una llamada improvisada,
una pequeña caricia dibujada en tu mirada.

Quiero tener el gusto de saberme ignorante, y alimentar mis ansias en pasión delirante.
Saberme pequeño y frágil, para resguardarme en tus brazos pequeños.
Y después dormir en los brazos tuyos mi amante.

Quiero por dios abrazarte y tocarte, solo por el hecho de necesitarte,
no quiero saberme amado cada instante, me bastan tus manos para sonreír

Me basta un beso dado en la frente, cuando estoy solo, cuando no tengo a nadie.
Quiero tenerte tan solo un instante, una noche de risas, poder voltear la mirada y no sentirme otro objeto.

Dame el olor de tus manos mi vida, dame amor, libertad sin medida, dame tu amor en pequeñas porciones.
Para saborear por momentos, el sueño que me pones enfrente.

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