domingo, 11 de septiembre de 2016

Sellos dorados

Cuentos Perdidos II "Los sellos dorados"
Julian nunca fue un chico comun y corriente, jamas le gustaron las cosas que le llaman la atencion a los demas chicos de su edad. Siempre le habian atraido los relatos sobre el otro mundo, sobre espiritus y posesiones, la lucha eterna del bien y del mal, asi como los relatos de terror consitian su hobbie mas amado.

Al contrario de los demas muchachos de su edad, Julian no era afecto a fiestas, reuniones o cualquier actividad que implicara socializar, era demasiado reservado y excesivamente solitario. Y como era de esperarse, una persona asi no contaba con demasiaas amistades, En su escuela era comun que fuera agredido, sobre todo por Arturo Garcia un bravucon que adoraba hacerle la vida imposible, lo golpeaba o tiraba en cada oportunidad que se presentara,

En alguna ocacion, se presento una excursion escolar a unas ruinas arqueologicas, en la provincia, a Julian le emocionaba este viaje y lo esperaba con la emocion de un niño  al esperar la navidad, pues dichas ruinas habian erguido muchisimas leyendas, y era llamada precisamente la casa de los espiritus donde se decia se albergaban las puertas al inframundo, donde se encontraba el gran jurado que llevaba la administracion de las almas buenas y mala y su destino final.

Cuando llego el dia y arribaron a su destino. Julian quedo absorto por el lugar. bovedas gigantescas, conectadas en tuneles tallados directamente en las paredes de roca caliza, tanto quedo alucinando el lugar que perdio por completo la nocion del guia, quien explicaba todo al grupo de alumnos visitantes y poco a poco fue quedandose atras.

Oportunidad a la que arturo no podia faltar, en silencio y con sigilo, lo siguio a distancia, el plan era hacerle una jugarreta que hiciera que mojara sus oantalones.

Se encontraba viendo los relieves de las paredes, escritos con algun idioma perdido, cuando detras de una estela enorme, salto Arturo dando un espeluznante grito. El joven cayo de espaldas por la impresion.

Julian: me espantaste!

reclamo aun nervioso el chico.

Arturo: esa era precisamente la ida jajajajaja rarito.

replico el bravucon, Julian se levanto aturdido y sacudiendose el polvo de la ropa y Arturo no espero para empujarlo contra la pared, riendose a carcajadas.

Julian; basta! dejame en paz!

Gritaba suplicante mientras era golpeado en el rostro. Arturo solo se burlaba y continuaba arremetiendo sonoros golpes en contra del chico mas debil, cuando de pronto se escucho una voz detras de el.

-Bueno ya estuvo bueno no?- Sono tajante la voz de tryanna, otra chica del colegio, una de las chicas mas lindas, de baja estatura, cabello negro y ojos profundos y verdes, ella jamas se habia metido en los abusos de arturo, pero era bien sabido por todos que ella era de su gusto por lo cual se aprovecho para detener el abuso a Julian.
Mientras discutian, El niño se levanto del suelo, incorporandose con algo de esfuerzo y se recargo en un relieve cuadrangular, sobresaliente de la pared de roca. Mientras Tryanna daba media vuelta dejando al abuson con la palabra en la boca, lo que provocaba que Arturo se virara nuevamente hacia Julian mas iracundo aun que antes, dandole un empujon, con tal fuerza que fue demasiado para su enclenque cuerpo, haciendo que se fuera de espaldas contra aquel relieve que habia usado de apoyo para levantarse. El sonido de golpe devolvio como si fuera un resorte a TRyanna al lugar, dirigiendose de nuevo en contra de Arturo, cuando una luz resplandeciente inundaba el lugar tomandolos por sorpresa. El relieve se habia hundido en la pared, abriendo una especie de camara secrete de la cual una luz cegadora emergía, aquel mecanismo secreto habia liberado ese cuarto aun desconocido para todos.

Cuando al fin recuperaron la vision, pudieron ver una especie de altar en el centro de un  hueco en una pared, Arturo fue el primero ena venturarse a acercarse, al resplandor como de el mismo sol. seguido de los otros dos chicos.

Al acercase pudieron ver 7 brazaletes, al parecer de oro, con piedreria exquisita y cada uno con un grabado en la parte superior de distintos simbolos. El chico abusador, no lo penso demasiado tomando uno de ellos y comenzó a gritar euforico.

Arturo: Soy rico! millonario!!! jajajaj!

Julian: mejor deja eso ahi, no sabemos ni que son ni para que sirven. Dijo preocupado el muchacho.

Arturo: que? ya vas a empezar con tus cuentos de fantasmas y maldiciones?, no me digas no me digas, en este momento viene para aca una momia para devorarnos jaja, o no no un ejercito de fantasmas que custodian esto? ay por favor! Recrimino el chico.

Julian; solo digo que esto debe tener algun proposito, sentencio gravemente.

Arturo: pero claro! el proposito de hacerme jodidamente millonario.

Tryanna: yo creo que Julian tiene razon, teno un mal presentimiento, aparte creo que ua nos perdimos.

Los tres voltearon en todas direcciones tratando de identificar el camino entre la multitud de corredores y bovedas de aquellas ruinas, lo cual era imposible.

Arturo: Mierda! no tengo este tesoro, solo para podrirme aqui dentro con el!

Mientras observaba amargamente la pieza que habia tomado se lo colocaba en el brazo.

Arturo: rayos!" cuanto lujo se daban!

Al decir esto, se escucho un pequeño "clicl" proveniente del seguro del brazalete  proveniente de sus dos patas colocadas en la aprte inferior y que hacian las veces de un seguro, asi quedaba aparentemente sellado por dentro.

Arturo: ARgh! no puedo quitarmelo!

Intento de muchos modos quitarselo pero era imposible

-Como demonios voy a venderlo si lo tengo pegado? esta atascado!.

Tryanna intento ayudarle y Julian se acercaba a ver los demas brazaletes. Un sonido vibratorio comenzaba a despedirse de ellos y Arturo fue presa del panico.

El sonido fue acompañado de pronto por un fulgor cegador que venia de cada pieza se hacia cada vez mas fuerte, mientras Arturo luchaba por quitarse el objeto del brazo, las demas comenzaban a elevarse en el aire, como danzando, cuatro de ellas salieron disparadas, flotando a gran velocidad, recorriendo los tuneles y perdiendose de vista pareciendose a fuegos fatuos, y los otros dos aprisionaban los brazos de Tryanna y Julian del mismo modo que el otro lo hizo con Arutro. Al cabo de unos segundos, todo qued en silencio, ya no se veia ni el resplandor ni se escuchaba el sonido.

Los chicos quedaron mirandose unos a otros desconcertados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Bienvenido, por favor deja un comentario