domingo, 8 de enero de 2017

Trabajando con Entidades, por Alan Chapman


Resumen

Uno de los campos más gratificantes de la práctica mágica es la interacción con inteligencias no humanas, o trabajar con los espíritus y los dioses. Esto puede tomar muchas formas, desde la creación de sus propias entidades hasta la práctica de una religión.

El Punto

Para hacer algunos amigos interesantes, aprenda acerca de la naturaleza de la Deidad, y obtendrá lo que desea obtener.

La Técnica

Trabajar con los espíritus, dioses u otras entidades, es extremadamente sencillo: usted decide cómo. Sería algo como esto:

Decida por qué quiere trabajar con una entidad (esto puede ser cualquier cosa, desde una razón específica como querer aumentar su riqueza, o sólo simple curiosidad).
Seleccione una entidad adecuada (si usted quiere realizar algún tipo de magia relacionada con el amor una diosa apropiada para trabajar podría ser Venus. Tampoco hay ninguna razón para que usted no pueda elegir para trabajar el espíritu de alguien que ha muerto, como un antepasado). [1]
Elija una representación de la entidad a trabajar; esto podría ser física (como una pintura o una estatua - ya sea comprada o hecha por usted mismo), o imaginaria (mediante la visualización de la forma de la entidad - ¿a qué se parece / huele / suena? o similar).
Alternativamente, si usted sabe cómo, puede trabajar sólo con el sigilo o sello de la entidad, en lugar de su forma o apariencia.

Recuerde: si usted elige visualizar la entidad, esto no significa que no se está dirigiendo a una inteligencia real; aquello que experimente será real.

Ahora hable con él o ella. Si usted no sabe qué decir, considere hacerlo como con cualquier extraño. Sea educado y amable.
Si usted sabe lo que le gusta a la entidad, dele una ofrenda y a cambio pida ayuda con cualquier problema que tenga presente. Puede parecer obvio tener que recordarlo, pero recuerde: si quiere interactuar con la entidad, debe decidirse y hacer algo para interactuar con ella.
Las ofrendas pueden tomar muchas formas, tales como alimentos, flores, alcohol, tabaco, obras de arte e incluso la respiración. Dos de las ofrendas más “poderosas” que las entidades de todos los ámbitos parecen apreciar por encima de todas las demás, son la sangre y el sexo.

Ofrecer la sangre no requiere una amputación o un asesinato (decepcionante, lo sé) - una sola gota de sangre extraída por medio de una aguja esterilizada y vertida sobre la representación de las entidades será suficiente.

Del mismo modo, en el caso de un sacrificio sexual, no es necesaria una orgía (pero si puede estar en una de todos modos, ¿por qué no?). Simplemente, ungir a la entidad con los fluidos sexuales de un acto específico como puede ser la masturbación es suficiente.

Hay que destacar que tanto la sangre como los sacrificios sexuales sólo deben utilizarse en casos extremos - que garantizan resultados excepcionales, ya si se usan con frecuencia algunos espíritus no esperarán menos en el futuro - y luego ¿cómo subir la apuesta?

 Una vez que usted ha dicho todo lo que tiene que decir, dé las gracias a la entidad y despídase.
 Se acostumbra a realizar un ritual de destierro en este punto.


Resultados Esperados

Hay que recordar que las inteligencias no humanas sólo pueden comunicarse a través de lo que está disponible - si usted no tiene una gran capacidad visionaria, no espere que la entidad aparezca y estreche su mano.

Si todo lo que hacemos es ponernos frente a la entidad, dar una ofrenda, pedir ayuda y dar gracias, el acto mágico funcionará incluso si no hay ninguna manifestación visible o una voz atronadora u objetos que flotan alrededor de su habitación, (a menos que, por supuesto, usted sea grosero y espere algo a cambio de nada).

Si desea más que una conversación de un solo sentido, cuando se trabaja con un espíritu puede ser adecuado ofrecer un medio de expresión, un dispositivo adivinatorio como un péndulo o tablero de Ouija. Otra buena manera es solicitar a la entidad que se comunique con usted a través de sus sueños, o permitir que se manifieste a través de su cuerpo (también conocido como  canalización, invocación o posesión).

A menos que una entidad tenga un interés especial en usted (esto podría suceder), puede tomar un tiempo antes de que la entidad se presente de forma espontánea o lo ayude a salir de los momentos de necesidad cuando usted se lo pida. Esto sucede cuando el beneficio real de la formación de una relación con una inteligencia no humana se hace evidente.



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